miércoles, 1 de junio de 2011

*Acepto y soy aceptado

Le preguntan a Nisargadatta
¿las cosas ocurren como usted quiere que ocurran,
o quiere usted que ocurran como ellas ocurren?
Las dos cosas. Acepto y soy aceptado. Yo soy todo y todo es yo.
Siendo el mundo no tengo miedo del mundo. Al ser todo,
¿a qué habría de tener miedo? El agua no teme al agua ni el fuego
teme al fuego. No tengo miedo porque no soy nada que pueda
experimentar miedo, o pueda estar en peligro. No tengo forma ni nombre.
El apego a la forma y al nombre es lo que crea el miedo. No tengo apegos,
soy nada y la nada no tiene miedo a nada. Por el contrario todo tiene miedo
a la Nada, porque cuando una cosa toca la Nada, se convierte en nada.
Es como un poso sin fondo, cualquier cosa que cae allí, desaparece. Nisargadatta
La respuesta que aporta está impregnada de compresión
y claridad con respecto al miedo y la aceptación.
Entiendo que en un principio no es fácil tener una vivencia directa de este texto. Creo que la compresión está en sentir que Soy Todo y  y Todo Soy Yo, siendo nada que esté relacionado con las formas. Cuando esta compresión se siente, la aceptación viene por si misma y se abre puertas para darle salidas a los miedos.